Mis Recetas
anticáncer:
El Lunes día 30,
estuvimos en una conferencia de la doctora, médico de familia, Odile Fernández,
autora del libro “Mis recetas anticáncer”. Este libro no es un compendio
de recetas de cocina, como puede parecer por su nombre, sino de recetas para la
vida.
En él, la Doctora
Odile relata su propia experiencia como paciente de un cáncer metastásico de
mal pronóstico y la investigación que llevó a cabo para superarlo. En todo el
proceso, el cambio de alimentación tuvo un papel importantísimo y fundamental.
Toda enfermedad es
susceptible de mejorar realizando cambios en la nutrición.
Me sorprendió su
actitud durante una conferencia repleta de público, no pidió que apagaran los
móviles, ni tampoco le molestaban los numerosos bebés que chillaban en la sala,
nada parecía distraerla, ella seguía hablando tranquila, como si no pasara
nada, con su actitud transmitía el conocimiento del que sabe que todo forma parte de
la vida.
En primer lugar nos
habló de la importancia de la felicidad y de la actitud interior ante lo
inevitable, la implicación en el proceso de la salud y de la enfermedad, la
necesidad de cumplir los propios sueños, (hacer aquellas cosas que deseamos sin
posponerlas) y de vivir dejando a un lado la ansiedad por lo que ocurre
alrededor nuestra o la que produce la obligación que nos marcamos de
cumplir a rajatabla con tareas y horarios.
Habló de muchas cosas
sencillas, de su proceso ante el cáncer, de su miedo y de sus muchas lágrimas
como mujer y madre joven ante la perspectiva de perder su vida y de que no iba
a ver crecer a su hijo… de su rebelarse ante la idea de la muerte próxima como
única opción y de su búsqueda de alternativas para seguir aquí.
Lo que nos enseña en
el libro es este enfrentamiento a lo que inevitablemente sucede, con toda la
batería de posibilidades que tenemos a nuestro alcance.
En primer lugar, ella cambió
su alimentación y perdió peso, dejó de lado todos los tóxicos potenciales,
tanto en la comida como en los productos cosméticos y de perfumería; nos animó
a tomar productos biológicos y pocas carnes, menor cantidad aún de las carnes
rojas y de ninguna comida procesada. Habló de la incidencia del cáncer en el
mundo con un mapa y, de las características de la alimentación en aquellos
países con más baja incidencia de la enfermedad… productos como las algas, las
setas, la cúrcuma, el jengibre o el chile, contienen potentes sustancias
anticancerígenas.
En definitiva de la
importancia vital que tiene para nuestra salud: qué comemos y cómo lo cocinamos.
¿Nos pueden salvar
definitivamente todas estas recetas?
Probablemente no sea
así siempre, la muerte seguirá existiendo, todos vamos a morir, dijo Odile,
sólo que no sabemos cuándo. Sin embargo, podemos hacer mucho mientras tanto por
nuestra salud y la de nuestra familia, por nuestra felicidad y la del resto de
los seres que comparten la vida con nosotros.
Nos despidió con las
fotos y la presencia de sus hijos, los lleva a todas partes dice, y a Iker (el
portador de buenas noticias) le tocaba darle el pecho.
Adriana Ruiz Díaz, Naturópata. Técnico Superior en
Dietética.
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