Modo de preparación:
- Aceite de sésamo eco de primera presión en frío: 100 ml.
- Aceite de oliva virgen extra eco de primera presión en frío: 25 ml.
- Los pétalos de dos claveles y dos rosas de olor frescas.
- Una cucharadita de postre con colmo de polvo de rosa damascena bio.
- Una cucharadita de café de polvo de hibisco bio.
Lo maceramos durante 45 días en un lugar cálido, después de este tiempo
lo filtramos, ponemos 5 gotas de tintura de benjuí , opcionalmente 5
gotas de vitamina A y E de venta en farmacias que potenciaran su efecto
regenerador tanto sobre la piel como en el cabello y tres gotas de
Aceite esencial de manzanilla bio.
A continuación lo guardamos en un lugar oscuro.
Este aceite es un excelente poder hidratante, estimula la microcirculación y después un suave masaje aporta a la piel un agradable tono rosado. Además, tiene un ligero efecto de protección frente a los rayos solares (factor protección 15) mejora las manchas cutáneas y otros problemas de la piel
En la medicina ayurveda es uno de los aceites más empleados, su efecto es de generar calor y es uno de los aceites que pueden utilizarse tanto en pieles secas como en pieles grasas. En el segundo caso haremos nuestro oleato sin aceite de oliva.
Podemos poner otros aceites para la maceración, por ejemplo el de almendras dulces o el de jojoba. No hemos utilizado el primero pues se enrancia con facilidad y el segundo, aunque es excelente es caro. El aceite de coco no es aconsejable porque a temperatura ambiente se solidifica y en algunas personas produce alergia, sobre todo si se va a utilizar para la cara, estos dos aceites son estables y muy agradables.
Inmejorables para masaje, limpieza facial e hidratación después de la ducha antes de secarse, tanto de bebés como de adultos. Infinitamente mejor que todos esos aceites minerales para bebés derivados líquidos del petróleo.
Adriana Ruiz.
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